El titular de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (Coninagro), Carlos Iannizzotto, asegura que la situación del sector lácteo “es compleja, ya que convergen distintos efectos que la complican”.
Preocupado,
Iannizzotto, enumera factores: “precios altos para el consumidor y muy bajos
para el productor, inconvenientes de orden climático que han afectado a la zona
núcleo; y el tema SanCor viene a ser como la cereza del postre”.
En su opinión,
“un primer paso para salir de esta crisis se dio al reunir en un ámbito de
discusión a productores, industriales y medios de comercialización, como ya se
comenzó a hacer en distintas áreas regionales.”
Para Iannizzotto
“cuando este diálogo comienza a nivelar, a establecer parámetros de
reciprocidad en los precios, estos resultan mucho más éticos y mucho más
normales.
En segundo
lugar, hay que ver cómo la Cooperativa SanCor -un importante referente de este
mercado- no pierde actividad. Y aquí lo positivo es que sus marcas están
intactas. Acá no hubo un problema de mala calidad, o sea que las marcas tienen
un público que las sigue consumiendo. Lo que pasa es que no están porque no hay
materia prima”.
Las
inundaciones de los campos, los bajos precios que se abonan al productor,
contra los altísimos de la góndola y la cesación de pagos de la cooperativa han
llevado a la paralización de la actividad en sus plantas industriales.
Iannizzotto cree
que “el Gobierno apunta ahora a ver cómo sigue funcionando la empresa (SanCor,
a la que ya le hizo varios aportes económicos) para mantener la producción
primaria y el sector laboral hasta que se pueda reorientar la empresa o deje de
ser una cooperativa. “Esto último, para nosotros sería un hecho lamentable,
pero primero están los productores y todos los trabajadores”, expresó.
En diálogo
con el programa “4 Patas”, que se emite por FM Palermo (94.7), el dirigente
admite que “uno de los problemas en el caso específico de SanCor son
distorsiones muy severas. Lamentable hubo graves distorsiones, tanto en la
administración y la organización empresaria como en el tema gremial. Allí hay
aportes y se manejan cifras que no tienen nada que ver con un sector en crisis
y con la centralidad que debe tener el productor”.
Aseguró que
“a SanCor no se le puede negar el papel protagónico que ha tenido durante
muchos años en el sector para lograr el precio más alto para la producción
primaria. Hoy, sin la Cooperativa, el tema se complica pues no hay un precio
testigo y, como la leche es un producto perecedero, el productor queda a la
deriva”.
Recordó que
“SanCor tiene distintas plantas y centros de distribución que hacen más fuerte
su protagonismo en el mercado lácteo y esta crisis que está viviendo la
Cooperativa está afectando a unos 50.000 productores, a lo que hay que sumar
peones de campo, operarios y todo lo que mueve el sector tambero”.
“El sector está mal, no solo por un problema de mercado, sino que también
contribuyeron los costos laborales y los altísimos aportes sindicales. En SanCor,
sin ninguna duda, ha habido falencias, y ahora estamos en problemas, pero creo
que esto de ninguna manera invalida el cooperativismo”.
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